La forma correcta de medir la liquidez en las empresas

Por: Mtro. Andrés Rodríguez Leos.

Hoy más que nunca la toma de decisiones dentro de las organizaciones debe sustentarse sobre los elementos con los que cuenta y/o carece, saber dónde están paradas, cuál es su situación financiera, y de ésta forma detectar sus fortalezas y debilidades.

Para lograr los objetivos descritos en el párrafo anterior es ello es indispensable que las empresas cuenten con información confiable que refleje la realidad en la que se encuentran.

Una de las preguntas que deben hacerse los empresarios y/o administradores al frente de los negocios es ¿cómo sincronizar el dinero? Para poder responder a ésta pregunta es necesario entender que las Finanzas tienen dos grandes ramas:

  • Las Finanzas Bursátiles, que se enfocan en lo relacionado con la Bolsa de valores, compra-venta de acciones, bonos, obligaciones, cobertura y cualquier instrumento que se negocie ahí.
  • Las Finanzas Corporativas, que se centran en las decisiones que las empresas toman respecto a la administración de sus recursos monetarios, tesorería, cobranza, compras, bancos, entre otros temas.

La compresión de lo anterior es de suma importancia, ya que cuando hablamos del concepto liquidez tenemos que posicionarnos en alguno de las ramas.

Hablando del mercado bursátil, es muy común escuchar que hay mayor o menor liquidez en los mercados, esto se refiere al efecto que tiene la comercialización de las acciones, es decir, la facilidad o dificultad para poder vender o comprar dichos instrumentos. Cuando se dificulta vender o comprar, se dice que hay poca liquidez, y por el contrario cuando los valores se pueden negociar de una manera más rápida se dice que aumentó la liquidez o que hay liquidez.

Sin embargo, en las finanzas corporativas el concepto es muy distinto, aunque hay que señalar que existen diferentes corrientes en la práctica tradicional que hoy en día lo siguen visualizando idéntico, lo cual ha llevado a muchas empresas a tomar decisiones incorrectas en su administración, ya que se cree que éste concepto tiene que ver con la disponibilidad de efectivo que se debe mantener en los bancos. Por ello es preciso definir que se debe entender como liquidez a “la capacidad que tienen las empresas para generar dinero de manera oportuna”.

Lo anterior se da cuando las empresas son eficientes con su operación, es decir, tienen el dinero suficiente (ingresos) en el momento oportuno, para hacer frente a sus diferentes obligaciones (egresos), lo cual no depende de que las empresas tengan reservas de dinero, sino  de tener sincronía entre el dinero que entra y el dinero que sale.

Para lograr esto, es necesario que las empresas calculen el ciclo de efectivo o ciclo de conversión de efectivo, el cual se define como el tiempo promedio en que la empresa genera dinero y entre menor sea el resultado éste será mucho mejor, ya que lo que indica es que la empresa tiene mayor capacidad para generar flujo, lo cual permitirá a las compañías generar más dinero con menor cantidad de inversión.

Para poder comprender mejor las ventajas de tener un menor ciclo, hay que subrayar que la liquidez es una Prueba de velocidad:

Imagine por un momento que usted es un piloto de autos y que la primera vuelta al circuito la hizo en 60 segundos, después de éste resultado hace algunos ajustes y utilizando el mismo equipo procede a realizar un segundo intento, al concluir la vuelta se percata que ahora le tomó 30 segundos dar la misma vuelta, esto quiere decir que ¿es más rápido? o ¿más lento?, la respuesta es que usted se volvió más rápido y que los ajustes dieron resultado y de seguir así usted podrá dar más vueltas con el mismo auto.

Esto es en lo que deben trabajar las empresas, en dar más vueltas con la misma inversión, realizando los ajustes necesarios para ser más eficientes.

Tradicionalmente, la medición de la liquidez se realiza a través de la Prueba de ácido; sin embargo, dicha prueba es estática y no refleja el verdadero concepto de la liquidez. Lo que hace esta prueba es manejar una relación de cobertura entre activos circulantes restándole los inventarios y pasivos de corto plazo. Su interpretación indica capacidad de enfrentar deudas, pero eso significa solvencia más no liquidez, es por ello que en muchas ocasiones las empresas pueden mostrar altos índices con ésta prueba, pero tener faltantes de dinero para hacer frente a sus obligaciones, entre ellos la nómina, los proveedores, rentas, etc.

El mal entendimiento de esto, lleva todos los días a tomar decisiones fatales dentro de la administración de las empresas, ya que para ser líquido según ésta prueba, se requiere de tener altos niveles de capital de trabajo y estos no deben estar invertidos en el inventario, por lo que entonces las empresas deben trabajar con altos niveles de ociosidad de efectivo y asumir los costos de la ineficiencia de su administración.

Por lo anterior, es necesario que las empresas consideren la diferencia entre ambas razones, la prueba de ácido mide capacidad de pago de una forma más estricta; sin embargo, ésta no deja de ser solvencia, y por otro lado razón denominada ciclo de efectivo mide la sincronía de las empresas para generar dinero es decir liquidez.

¿Cuáles son los retos que enfrenta su organización en este sentido?

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